“E irá delante de él con el espíritu y el poder de Elías, para hacer volver los corazones de los padres a los hijos, y de los rebeldes a la prudencia de los justos, para preparar al Señor un pueblo bien dispuesto.” Lucas 1: 17.
El Señor tenia a un escogido que prepararía el camino para su primera venida. Así también ahora, el tiene un pueblo que debe preparar el camino para su segunda venida.
Juan había de salir como mensajero de Jehová, para comunicar a los hombres la luz de Dios. Debía dar una nueva dirección a sus pensamientos. Debía hacerles sentir la santidad de los requerimientos de Dios, y su necesidad de la perfecta justicia divina. Un mensajero tal debía ser santo. Debía ser templo del Espíritu de Dios. A fin de cumplir su misión, debía tener una constitución física sana, y fuerza mental y espiritual. Por lo tanto, le sería necesario dominar sus apetitos y pasiones. Debía poder dominar todas sus facultades, para poder permanecer entre los hombres tan inconmovible frente a las circunstancias que le rodeasen como las rocas y montañas del desierto.*
Dios también esta llamando a hombres y mujeres para esta obra tan solemne. Especialmente, hoy en día cuando estamos tan ocupados en todo, menos lo celestial. Es que Dios en su amor y misericordia nos hace este llamado. Todo los acontecimientos nos están señalando que la segunda venida del Señor Jesús esta cerca. Hay tantas personas que no conocen que hay un Dios que creo los cielos y la tierra, y un día mando a su único Hijo para salvarlos.
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Juan 3:16.
Es nuestro deber mostrar al mundo y hablarle de ese Dios que nos amo tanto que dio lo que es y era tan precioso, su Único Hijo, al Señor Jesús.
Al preparar el camino para la primera venida de Cristo, representaba a aquellos que han de preparar un pueblo para la segunda venida de nuestro Señor. El mundo está entregado a la sensualidad. Abundan los errores y las fábulas. Se han multiplicado las trampas de Satanás para destruir a las almas. Todos los que quieran alcanzar la santidad en el temor de Dios deben aprender las lecciones de temperancia y dominio propio. Las pasiones y los apetitos deben ser mantenidos sujetos a las facultades superiores de la mente. Esta disciplina propia es esencial para la fuerza mental y la percepción espiritual que nos han de habilitar para comprender y practicar las sagradas verdades de la Palabra de Dios. Por esta razón, la temperancia ocupa un lugar en la obra de prepararnos para la segunda venida de Cristo.*
Y esto, conociendo el tiempo, que es ya hora de levantarnos del sueño; porque ahora está más cerca de nosotros nuestra salvación que cuando creímos. La noche está avanzada, y se acerca el día. Desechemos, pues, las obras de las tinieblas, y vistámonos las armas de la luz. Andemos como de día, honestamente; no en glotonerías y borracheras, no en lujurias y lascivias, no en contiendas y envidia, sino vestíos del Señor Jesucristo, y no proveáis para los deseos de la carne. Romanos 13:11-14.
Si queremos ser instrumentos en las manos de Dios. Pidámosle ayuda, El nos dice:
…Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá. Lucas 11:9,10.
El Señor Jesús esta por regresar por segunda vez, y el viene a buscar a un pueblo puro y sin mancha.
Por eso, amados estando en espera de estas cosas, procurad con diligencia ser hallados por el sin mancha e irreprochables, en paz. 2 Pedro 3:14.
Hay un último mensaje que dar a este mundo. Pidámosle a Dios que lo podamos hacer nosotros. Dejemos todo aquello que no permite que el Espíritu Santo nos unja con su poder. Permitamos ser usados. como lo fueron los hombres y mujeres del pasado.
¡EL SEÑOR VIENE PRONTO, AMEN, SI, VEN SEÑOR JESÚS!
*El Deseo De Toda Las Gentes, “10. La Voz que Clamaba en el Desierto”, Elena G. de White
* KCC
No hay comentarios:
Publicar un comentario