martes, noviembre 30, 2010

Pensamiento Del Día

Velad, pues, en todo tiempo orando. Lucas 21:36.
La época en que vivimos es importante y solemne. El Espíritu de Dios se está retirando gradual pero ciertamente de la tierra...

El estado actual de las cosas muestra que tiempos de perturbación están por caer sobre nosotros. Los diarios están llenos de alusiones referentes a algún formidable conflicto que debe estallar dentro de poco. Son siempre más frecuentes los audaces atentados contra la propiedad. Las huelgas se han vuelto asunto común. Los robos y los homicidios se multiplican. Hombres dominados por espíritus de demonios quitan la vida a hombres, mujeres y niños. El vicio seduce a los seres humanos y prevalece el mal en todas sus formas.

En el mundo todo es agitación. Las señales de los tiempos son alarmantes. Los acontecimientos venideros proyectan ya sus sombras delante de sí. El Espíritu de Dios se está retirando de la tierra, y una calamidad sigue a otra por tierra y mar. Hay tempestades, terremotos, incendios, inundaciones, homicidios de toda magnitud. ¿Quién puede leer lo futuro? ¿Dónde hay seguridad? No hay seguridad en nada que sea humano o terrenal. Rápidamente los hombres se están colocando bajo la bandera que han escogido...

La crisis se está acercando gradualmente a nosotros. El sol brilla en los cielos y recorre su órbita acostumbrada, y los cielos continúan declarando la gloria de Dios. Los hombres siguen comiendo y bebiendo, plantando y edificando, casándose y dándose en casamiento. Los negociantes siguen comprando y vendiendo. Los hombres siguen luchando unos con otros, contendiendo por el lugar más elevado. Los amadores de placeres siguen atestando los teatros, los hipódromos, los garitos de juego. Prevalece la más intensa excitación, y sin embargo el tiempo de gracia está llegando rápidamente a su fin, y cada caso está por ser decidido para la eternidad. Satanás ve que su tiempo es corto...

Solemnemente llegan hasta nosotros, a través de los siglos, las palabras amonestadoras de nuestro Señor desde el Monte de las Olivas: “Mirad también por vosotros mismos, que vuestros corazones no se carguen de glotonería y embriaguez y de los afanes de esta vida, y venga de repente sobre vosotros aquel día” Lucas 21:34.

lunes, noviembre 29, 2010

Pensamiento Del Día

El primero y más alto deber de toda criatura racional es el de escudriñar la verdad en las Sagradas Escrituras y luego andar en la luz y exhortar a otros a que sigan su ejemplo. Día tras día deberíamos estudiar diligentemente la Biblia, pesando cada pensamiento y comparando texto con texto. Con la ayuda de Dios debemos formarnos nuestras propias opiniones ya que tenemos que responder a Dios por nosotros mismos.

Nunca se debería estudiar la Biblia sin oración. Solo el Espíritu Santo puede hacernos sentir la importancia de lo que es fácil comprender, o impedir que nos apartemos del sentido de las verdades de difícil comprensión. Hay santos ángeles que tienen la misión de influir en los corazones para que comprendan la Palabra de Dios, de suerte que la belleza de esta nos embelese, sus advertencias nos amonesten y sus promesas nos animen y vigoricen. Deberíamos hacer nuestra la petición del salmista: “¡Abre mis ojos, para que yo vea las maravillas de tu ley!” Salmos 119:18. Muchas veces las tentaciones parecen irresistibles, y es porque se ha descuidado la oración y el estudio de la Biblia, y por ende no se pueden recordar luego las promesas de Dios ni oponerse a Satanás con las armas de las Santas Escrituras. Pero los ángeles rodean a los que tienen deseos de aprender cosas divinas, y en situaciones graves traerán a su memoria las verdades que necesitan. “Porque vendrá el enemigo como río, mas el Espíritu de Jehová levantará bandera contra él” Isaías 59:19.

Jesús prometió a sus discípulos “el Consolador, es decir, el Espíritu Santo, a quien—dijo—el Padre enviará en mi nombre”, y agregó: “El os enseñará todas las cosas, y os recordará todo cuanto os he dicho” S. Juan 14:26. Pero primero es preciso que las enseñanzas de Cristo hayan sido atesoradas en el entendimiento, si queremos que el Espíritu de Dios nos las recuerde en el momento de peligro. “En mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti” Salmos 119:11.

jueves, noviembre 25, 2010

Pensamiento Del Día - ¡Cuál Amor!

Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios; por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoció a él. 1 Juan 3:1.
“Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios” Juan 1:12. “Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios. Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos: ¡Abba, Padre! El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios. Y si hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que padecemos juntamente con él, para que juntamente con él seamos glorificados. Pues tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse” Romanos 8:14-18.

Juan no puede encontrar palabras adecuadas para describir el admirable amor de Dios para el hombre pecador; pero insta a todos para que contemplen el amor de Dios revelado en el don de su Hijo unigénito. Por la perfección del sacrificio hecho por la raza culpable, los que creen en Cristo... pueden ser salvados de la ruina eterna. Cristo era uno con el Padre. Sin embargo, cuando el pecado entró en nuestro mundo por la transgresión de Adán, estuvo dispuesto a descender de la excelsitud de Aquel que era igual a Dios, que moraba en luz inaccesible para la humanidad, tan llena de gloria que ningún hombre podía contemplar su rostro y vivir, y se sometió a los insultos, vilipendios, sufrimientos, dolores y muerte, a fin de responder a las demandas de la inmutable ley de Dios y establecer un camino de escape para el transgresor por medio de su muerte y de su justicia. Esta fue la obra que su Padre le dio que hiciera; y los que aceptan a Cristo, reposando plenamente sobre sus méritos, se convierten en los hijos e hijas adoptivos de Dios, son herederos de Dios y coherederos con Cristo.

miércoles, noviembre 24, 2010

Pensamiento Del Día

¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aún, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros. Romanos 8:34
Cristo Jesús está representado como estando continuamente ante el altar, ofreciendo momento tras momento el sacrificio por los pecados del mundo. Es un ministro del verdadero tabernáculo que el Señor erigió y no hombre. ... No se necesitan más expiaciones diarias y anuales, pero el sacrificio expiatorio mediante un Mediador es esencial debido a que siempre se cometen pecados. Jesús está oficiando en la presencia de Dios, ofreciendo su sangre derramada ...

Cristo, nuestro Mediador, y el Espíritu Santo interceden constantemente en favor del hombre, pero el Espíritu no suplica por nosotros como lo hace Cristo que presenta su sangre, derramada desde la fundación del mundo; el Espíritu obra sobre nuestro corazón, provocando oraciones y arrepentimiento, alabanza y agradecimiento.

martes, noviembre 23, 2010

Pensamiento Del Día

Despertad a la gente para la preparación—Vivimos en la terminación de la historia de esta tierra... La profecía se está cumpliendo. Pronto Cristo vendrá con poder y grande gloria. No tenemos tiempo que perder. Resuene el mensaje con fervientes palabras de amonestación.

Por doquiera debemos persuadir a los hombres a arrepentirse y huir de la ira que vendrá. Tienen almas que salvar o perder. No haya indiferencia en este asunto. El Señor llama a obreros que estén llenos de un propósito ferviente y decidido. Decid a la gente que esté preparada a tiempo y fuera de tiempo. Con las palabras de vida en vuestros labios, id a decir a los hombres y mujeres que el fin de todas las cosas está a las puertas.

Preservemos nuestras almas en el amor de Dios. La nota de amonestación debe ser dada. La verdad no debe languidecer en nuestros labios. Debemos despertar a la gente para que haga una preparación inmediata, porque poco nos imaginamos lo que está delante de nosotros. Estoy tan convencida como siempre de que vivimos en el último remanente del tiempo. Presente cada maestro una puerta abierta ante todos los que quieran venir a Jesús, arrepintiéndose de sus pecados.

lunes, noviembre 22, 2010

El Espíritu Santo Y La Trinidad

Algunos en nuestra iglesia están enseñando que el Espíritu Santo no es ni una persona ni un miembro de la Trinidad. ¿Es eso cierto?

Algunos adventistas han descubierto que prácticamente todos nuestros pioneros eran anti-trinitarios y han concluido que la iglesia de hoy debe rechazar la doctrina de la Trinidad. La verdad es que el Señor guió este movimiento a una comprensión más bíblica de Dios. Hoy en día, basado en la Biblia, afirmamos la verdad de un Dios en una pluralidad de personas. Menciono aquí sólo algunas de las ayudas bíblicas disponibles.

1. El Espíritu Como Poder. La opinión de que el Espíritu no es una persona se basa parcialmente en el hecho de que muy a menudo se le describe como un poder que viene de Dios, que cae sobre la gente, permitiendoles realizar ciertas tareas (por ejemplo, Jueces 3:10; Hechos 2: 4). Por otra parte, la palabra griega para "espíritu" (pneuma) es neutral, es decir, podemos referirnos al Espíritu como "algo", dando a entender que Él no es una persona. Pero eso es un fenómeno de la gramática griega que no necesariamente tiene un significado teológico.

2. El Espíritu y Jesús. Con la venida de Jesús, nuestro conocimiento de la Divinidad se enriqueció grandemente. Debido a que Jesús era Dios en carne humana (Juan 1:1; 20:28; Tito 2:13), distinto del Padre (Mateo 03:17), pero uno con Él (Juan 14:10), sus seguidores comenzaron a darse cuenta que había en el misterio de Dios, una pluralidad de personas. El misterio aumenta cuando Jesús no describe al Espíritu como algo sino como a una persona, que tomaría su lugar en la experiencia de los discípulos: "Yo [Jesús] le pediré al Padre y os dará otro Consolador. . . el Espíritu de la verdad "(Juan 14:16).

jueves, noviembre 18, 2010

Pensamiento Del Día

Por medio de la cooperación del Espíritu divino, los apóstoles realizaron una obra que conmovió al mundo. El Evangelio fue llevado a toda nación en una sola generación.

Gloriosos fueron los resultados que acompañaron al ministerio de los apóstoles escogidos por Cristo...

Los apóstoles no cumplían su misión por su propio poder, sino con el del Dios viviente. Su tarea no era fácil. Las primeras labores de la iglesia cristiana se realizaron bajo opresión y amarga aflicción. Los discípulos encontraban constantemente privaciones, calumnias y persecuciones en su trabajo; pero no consideraban sus propias vidas como caras, antes se regocijaban porque eran llamados a sufrir por Cristo. La irresolución, la indecisión, y la debilidad de propósito, no tenían lugar en sus esfuerzos. Estaban dispuestos a gastar y ser gastados. El sentido de la responsabilidad que descansaba sobre ellos, purificaba y enriquecía sus vidas; y la gracia del cielo se revelaba en las conquistas que lograron para Cristo. Con el poder de la omnipotencia, Dios obraba por intermedio de ellos para hacer triunfar el Evangelio.

miércoles, noviembre 17, 2010

Pensamiento Del Día

Mediante la proclamación del Evangelio al mundo, está a nuestro alcance apresurar la venida de nuestro Señor.

Es privilegio de todo cristiano, no solamente esperar, sino apresurar la venida de nuestro Señor Jesucristo. Si todos los que profesan su nombre estuvieran llevando frutos para su gloria, cuán rápidamente todo el mundo sería sembrado con la simiente del Evangelio. Pronto la última cosecha sería levantada, y Cristo vendría para reunir el precioso grano.

Cuando termine el mensaje—[La venida del Señor] no demorará más que el tiempo que tome la tarea de presentar el mensaje a toda nación, lengua y pueblo. ¿Olvidaremos nosotros, los que pretendemos ser estudiantes de las profecías, que la tolerancia de Dios para con los impíos es una parte del vasto y misericordioso plan por el cual él está tratando de lograr la salvación de las almas?

martes, noviembre 16, 2010

Pensamiento Del Día

Si los adventistas, después del gran chasco de 1844, se hubieran aferrado a su fe y hubieran ido unidos en pos de la providencia de Dios que abría el camino, y si hubieran recibido el mensaje del tercer ángel y si lo hubieran proclamado al mundo con el poder del Espíritu Santo, habrían visto la salvación de Dios, el Señor hubiera obrado con poder mediante sus esfuerzos, la obra se habría terminado y Cristo habría venido para recibir a su pueblo y darle su recompensa. Pero en el período de duda e incertidumbre que siguió después del chasco, muchos de los creyentes del advenimiento perdieron su fe... En esta forma la obra fue estorbada y el mundo quedó en tinieblas. Si todo el cuerpo adventista se hubiera unido en torno de los mandamientos de Dios y de la fe de Jesús, ¡cuán ampliamente diferente habría sido nuestra historia!.

No era la voluntad de Dios que se demorara así la venida de Cristo. Dios no tenía el propósito de que su pueblo, Israel, vagara cuarenta años por el desierto. Prometió guiarlos directamente a la tierra de Canaán, y establecerlos allí como un pueblo santo, sano y feliz. Pero aquellos a quienes primero se les predicó, no entraron “a causa de incredulidad” Hebreos 3:19. Sus corazones estaban llenos de murmuración, rebelión y odio, y Dios no pudo cumplir su pacto con ellos.

Durante cuarenta años, la incredulidad, la murmuración y la rebelión impidieron la entrada del antiguo Israel en la tierra de Canaán. Los mismos pecados han demorado la entrada del moderno Israel en la Canaán celestial. En ninguno de los dos casos faltaron las promesas de Dios. La incredulidad, la mundanalidad, la falta de consagración y las contiendas entre el profeso pueblo de Dios nos han mantenido en este mundo de pecado y tristeza tantos años”

lunes, noviembre 15, 2010

Pensamiento Del Día

Los ángeles de Dios en sus mensajes dados a los hombres representan el tiempo como algo muy corto. Así es como siempre me ha sido presentado. Es cierto que el tiempo ha sido más largo de lo que habíamos esperado en los primeros días del mensaje. Nuestro Salvador no apareció tan pronto como lo esperábamos. ¿Pero ha fallado la Palabra de Dios? ¡Nunca! Debiera recordarse que las promesas y las amenazas de Dios son igualmente condicionales.

Dios ha encomendado a su pueblo una obra que debe terminarse en la tierra. El mensaje del tercer ángel debía predicarse, las mentes de los creyentes debían dirigirse hacia el santuario celestial, donde Cristo había entrado para realizar expiación por su pueblo. Había que llevar adelante la reforma del día de reposo. La brecha abierta en la ley de Dios debía ser reparada. El mensaje debía proclamarse en alta voz para que todos los habitantes de la tierra pudieran recibir la advertencia. El pueblo de Dios debía purificar sus almas mediante la obediencia a la verdad y estar preparado para presentarse delante de él sin mancha en el momento de su venida.

viernes, noviembre 12, 2010

Pensamiento Del Día

"La larga noche de tinieblas es penosa, pero la mañana es postergada por misericordia, porque si el Señor viniera, muchos serían hallados desapercibidos. El deseo de Dios de que su pueblo no perezca ha sido la razón de tan larga demora.

La obra podría haber sido terminada—Si el propósito de Dios de dar al mundo el mensaje de misericordia hubiese sido llevado a cabo por su pueblo, Cristo habría venido ya a la tierra, y los santos habrían recibido su bienvenida en la ciudad de Dios.

Sé que si el pueblo de Dios se hubiera mantenido en una relación viviente con él, si hubiera obedecido su Palabra, estaría hoy en la Canaán celestial.

Si todo centinela de los muros de Sion hubiera dado a la trompeta un sonido certero, el mundo habría oído este mensaje de amonestación. Pero la obra está atrasada en años. Mientras los hombres dormíamos, Satanás nos ha sacado ventaja."

Pero la promesa de Dios no ha fallado.

jueves, noviembre 11, 2010

Pensamiento Del Día

El fin se acerca; avanza sigilosa, insensible y silenciosamente, como el ladrón en la noche. Concédanos el Señor la gracia de no dormir por más tiempo, como otros lo hacen, sino que seamos sobrios y velemos. La verdad está a punto de triunfar gloriosamente, y todos los que decidan ahora ser colaboradores con Dios triunfarán con ella. El tiempo es corto; la noche se acerca cuando nadie podrá trabajar.

Conversiones como en el Pentecostés—Viene el tiempo cuando habrá tantas personas convertidas en un día como las hubo en el día de Pentecostés, después que los discípulos recibieron el Espíritu Santo.

Dios hará pronto grandes cosas por nosotros, si nos allegamos humildes y confiados a sus pies... Más de mil personas se convertirán en un solo día, la mayor parte de las cuales adjudicarán sus primeras convicciones a la lectura de nuestras publicaciones.

Durante el fuerte clamor, la iglesia, ayudada por las interposiciones providenciales de su exaltado Señor, difundirá el conocimiento de la salvación tan abundantemente que la luz será comunicada a toda ciudad y pueblo. La tierra será llena del conocimiento de la salvación. Tan abundantemente habrá coronado de éxito el Espíritu renovador de Dios a los agentes intensamente activos, que la luz de la verdad presente brillará por todas partes.

miércoles, noviembre 10, 2010

Pensamiento Del Día

Es privilegio de todo cristiano no sólo esperar sino apresurar la venida de nuestro Señor Jesucristo. Si todos los que profesan su nombre llevasen frutos para su gloria, ¡cuán prestamente quedaría sembrada en el mundo la semilla del Evangelio! La última mies maduraría rápidamente, y Cristo vendría para recoger el precioso grano.

Suspendido de la cruz, Cristo era el Evangelio... “He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo” Juan 1:29. ¿No mantendrán nuestros miembros de iglesia sus ojos fijos en un Salvador crucificado y resucitado, en quien se cifran sus esperanzas de vida eterna? Este es nuestro mensaje... para los impenitentes, nuestra exhortación para los afligidos, la esperanza para cada creyente. Si podemos despertar en la mente de los hombres un interés que les haga fijar sus ojos en Cristo, podemos hacernos a un lado y pedirles que continúen fijando sus ojos en el Cordero de Dios. Aquel cuyos ojos estén fijos en Jesús, lo abandonará todo. Morirá al egoísmo. Creerá en toda la Palabra de Dios, que está tan gloriosa y maravillosamente exaltada en Cristo.

martes, noviembre 09, 2010

Pensamiento Del Día

Porque haré estremecer los cielos, y la tierra se moverá de su lugar, en la indignación de Jehová de los ejércitos, y en el día del ardor de su ira. Y como gacela perseguida, y como oveja sin pastor, cada cual mirará hacia su pueblo, y cada uno huirá a su tierra. Isaías 13:13, 14.
Densas nubes cubren aún el firmamento; sin embargo el sol se abre paso de vez en cuando, como si fuera el ojo vengador de Jehová. Fieros relámpagos rasgan el cielo con fragor, envolviendo a la tierra en claridad de llamaradas. Por encima del ruido aterrador de los truenos, se oyen voces misteriosas y terribles que anuncian la condenación de los impíos. No todos entienden las palabras pronunciadas; pero los falsos maestros las comprenden perfectamente. Los que poco antes eran tan temerarios, jactanciosos y provocativos, y que tanto se regocijaban al ensañarse con el pueblo de Dios observador de sus mandamientos, se sienten presa de consternación y tiemblan de terror. Sus llantos dominan el ruido de los elementos. Los demonios confiesan la divinidad de Cristo y tiemblan ante su poder, mientras que los hombres claman por misericordia...

Por un desgarrón de las nubes una estrella arroja rayos de luz cuyo brillo queda cuadruplicado por el contraste con, la obscuridad. Significa esperanza y júbilo para los fieles, pero severidad para los transgresores de la ley de Dios. Los que todo lo sacrificaron por Cristo están entonces seguros, como escondidos en los pliegues del pabellón de Dios. Fueron probados, y ante el mundo y los despreciadores de la verdad demostraron su fidelidad a Aquel que murió por ellos. Un cambio maravilloso se ha realizado en aquellos que conservaron su integridad ante la misma muerte. Han sido librados como por ensalmo de la sombría y terrible tiranía de los hombres vueltos demonios. Sus semblantes, poco antes tan pálidos, tan llenos de ansiedad y tan macilentos, brillan ahora de admiración, fe y amor. Sus voces se elevan en canto triunfal: “Dios es nuestro refugio y fortaleza; socorro muy bien experimentado en las angustias. Por lo tanto no temeremos aunque la tierra sea conmovida, y aunque las montañas se trasladen al centro de los mares; aunque bramen y se turben sus aguas, aunque tiemblen las montañas a causa de su bravura” Salmos 46:1-3.

lunes, noviembre 08, 2010

Pensamiento Del Día

“Dijo, pues, Dios a Noé: He decidido el fin de todo ser, porque la tierra está llena de violencia a causa de ellos; y he aquí que yo los destruiré con la tierra” Génesis 6:13.
En el futuro habrá tronos quebrantados y gran angustia entre las naciones conmocionadas. Satanás realizará una intensa actividad. La tierra estará llena de los gemidos de las naciones sufrientes y moribundas. Habrá guerra. Cada lugar de la tierra se llenará de confusión, como si de sus entrañas brotaran los elementos ardientes que destruirán a los habitantes del mundo quienes se asemejarán en su impiedad a los pobladores del mundo antediluviano.

En aquel tiempo [antes del Diluvio], al igual que en éste, habrá sólo dos grupos, los justos y los impíos. Enoc y otros caminaron con Dios rectamente. Pero la gran mayoría de los habitantes de la tierra se habían dado a la iniquidad, y su maldad había ascendido delante del Señor...

Dios ordenó que se construyera un arca para todos los que quisieran salvarse de la destrucción venidera. Él tenía que hablar de cierto modo contra la iniquidad que se había incrementado en proporciones pavorosas. El Señor habría de vestirse de venganza y ejecutar su juicio contra los transgresores de su ley.

viernes, noviembre 05, 2010

Avanzad



* Pastor Ted Wilson

Pensamiento Del Día

“Conservaos en el amor de Dios, esperando la misericordia de nuestro Señor Jesucristo para vida eterna” Judas 21.
Somos la familia de Dios, somos sus hijos y él nos ha de instruir en relación a lo que habrá de acontecer en el futuro. Se requiere una actitud vigilante y una búsqueda ferviente como preparación para los solemnes eventos que pronto se desencadenarán. Los hombres y mujeres perfectos en Cristo no debieran invertir todo su tiempo de espera en la meditación y la contemplación. En tanto nos consagramos en quietud a la meditación y oración, cuando nos alejamos de la excitación y el bullicio para establecer comunión con Dios y determinar cuál es su voluntad para nosotros, no debemos olvidar que tenemos que comunicar un mensaje de advertencia al mundo.

Enoc caminó con Dios y llevó un mensaje de advertencia a los habitantes del mundo antiguo. Sus palabras y acciones, su ejemplo de piedad, fueron un testimonio constante en favor de la verdad. En una época que no favorecía el desarrollo de un carácter puro y santo, como la nuestra, él vivió una vida de obediencia. Tan llena estaba la tierra de impurezas que el Señor la lavó con un Diluvio. Fue como si el mundo se hubiese vuelto al revés a fin de vaciarlo de toda corrupción.

Enoc era santo porque caminó con Dios como el Señor quería. En su experiencia el mundo tuvo una representación de cómo serán aquellos que han de ser arrebatados en las nubes para encontrar al Señor en el aire en ocasión de su venida. Así como fue la experiencia de Enoc ha de ser la nuestra. La piedad personal debe marchar unida con las más enérgicas advertencias y llamamientos. Hemos de señalar lo que está ocurriendo y lo que pronto vendrá. Se nos ha instruido a ser, en lo que requiere diligencia, “no perezosos, fervientes en espíritu, sirviendo al Señor”. Hemos de ser fervientes en nuestros esfuerzos por preparar el camino ante el Rey: en preparar un pueblo para la venida del Señor. En nuestro servicio al Señor debiera manifestarse un espíritu ferviente. Las lámparas del alma deben mantenerse llenas y encendidas.

El servicio que rendimos a Dios requiere la integridad de la mente, del alma y de las fuerzas. Hemos de consagrarnos a Dios sin reservas, a fin de ofrecer una imagen celestial y no terrenal. Debe manifestarse un avivamiento de la sensibilidad, para que la mente pueda despertar plenamente a la labor que se debe realizar en todas las clases sociales, altas y bajas, ricas y pobres, educadas e ignorantes. Debemos revelar una ternura semejante a la del gran Pastor quien carga a los corderos en sus brazos y guarda su rebaño de todo mal y lo conduce por sendas seguras. Los seguidores de Cristo debieran manifestar ternura y simpatía y un intenso deseo de impartir las verdades que serán de vida eterna para todo aquel que las reciba.

jueves, noviembre 04, 2010

Pensamiento Del Día

Una de las verdades más solemnes y más gloriosas que revela la Biblia, es la de la segunda venida de Cristo para completar la gran obra de la redención. Al pueblo peregrino de Dios, que por tanto tiempo hubo de morar “en región y sombra de muerte”, le es dada una valiosa esperanza inspiradora de alegría con la promesa de la venida de Aquel que es “la resurrección y la vida” para hacer “volver a su propio desterrado”. La doctrina del segundo advenimiento es verdaderamente la nota tónica de las Sagradas Escrituras. Desde el día en que la primera pareja se alejara apesadumbrada del Edén, los hijos de la fe han esperado la venida del Prometido que había de aniquilar el poder destructor de Satanás y volverlos a llevar al paraíso perdido. Hubo santos desde los antiguos tiempos que miraban hacia el tiempo del advenimiento glorioso del Mesías como hacia la consumación de sus esperanzas.

Enoc, que se contó entre la séptima generación descendiente de los que moraran en el Edén y que por tres siglos anduvo con Dios en la tierra, pudo contemplar desde lejos la venida del Libertador. “He aquí que viene el Señor, con las huestes innumerables de sus santos ángeles, para ejecutarjuicio sobre todos” Judas 14, 15.

El patriarca Job, en la lobreguez de su aflicción, exclamaba con confianza inquebrantable: “Pues yo sé que mi Redentor vive, y que en lo venidero ha de levantarse sobre la tierra... aun desde mi carne he de ver a Dios; a quien yo tengo de ver por mí mismo, y mis ojos le mirarán; y ya no como a un extraño” Job 19:25-27.

miércoles, noviembre 03, 2010

Pensamiento Del Día

La predicación de la segunda venida de Cristo, el anuncio de su cercanía, es una parte esencial del mensaje evangélico.

El Señor viene pronto. Hablen acerca de ello, oren para que así sea y créanlo. Transfórmenlo en una parte de su propia vida. Tendrán que hacer frente a un espíritu de dudas y objeciones, pero que se disipará ante una confianza en Dios firme y consistente. Cuando se presenten perplejidades y obstáculos eleven el alma a Dios en cánticos de agradecimiento. Colóquense la armadura cristiana y asegúrense de que sus pies estén “calzados con el apresto del evangelio de la paz”. Prediquen la verdad con intrepidez y fervor. Recuerden que el Señor contempla compasivamente esta región y que conoce su pobreza y destitución. Los esfuerzos que realizan no serán un fracaso.

Dios ha pedido a este pueblo que dé al mundo el mensaje de la pronta venida de Cristo. Hemos de dar a los hombres la última invitación a la fiesta del evangelio, la última invitación a la cena de bodas del Cordero. En miles de lugares donde no se ha oído el llamamiento, éste ha de ser oído todavía. Muchos de los que no han dado el mensaje lo han de proclamar todavía. Vuelvo a dirigirme a vosotros, jóvenes: ¿No os ha llamado Dios a pregonar este mensaje?

martes, noviembre 02, 2010

Pensamiento Del Día

Cristo nos dice cuándo será introducido el día de su reino. No nos dice que todo el mundo será convertido, sino que “será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin” Mateo 24:14. Al dar el evangelio al mundo, tenemos la posibilidad de apresurar la venida del día de Dios. Si la iglesia de Cristo hubiera llevado a cabo la obra señalada tal como el Señor lo mandó, todo el mundo ya hubiera sido amonestado y el Señor Jesús hubiera venido a la tierra en poder y gran gloria.

Cristo va a venir en las nubes y con grande gloria. Le acompañará una multitud de ángeles resplandecientes. Vendrá para resucitar a los muertos y para transformar a los santos vivos de gloria en gloria. Vendrá para honrar a los que le amaron y guardaron sus mandamientos, y para llevarlos consigo. No los ha olvidado ni tampoco ha olvidado su promesa. Volverán a unirse los eslabones de la familia. Cuando miramos a nuestros muertos, podemos pensar en la mañana en que la trompeta de Dios resonará, cuando “los muertos serán levantados sin corrupción, y nosotros seremos transformados”. Aún un poco más, y veremos al Rey en su hermosura. Un poco más, y enjugará toda lágrima de nuestros ojos. Un poco más, y nos presentará “delante de su gloria irreprensibles, con grande alegría”. Por lo tanto, cuando dio las señales de su venida, dijo: “Cuando estas cosas comenzaren a hacerse, mirad, y levantad vuestras cabezas, porque vuestra redención está cerca”.

lunes, noviembre 01, 2010

Pensamiento Del Día

Vamos hacia la patria. El que nos amó al punto de morir por nosotros, nos ha edificado una ciudad. La nueva Jerusalén es nuestro lugar de descanso. No habrá tristeza en la ciudad de Dios. Nunca más se oirá el llanto ni la endecha de las esperanzas destrozadas y de los afectos tronchados. Pronto las vestiduras de pesar se trocarán por el manto de bodas. Pronto presenciaremos la coronación de nuestro Rey. Aquellos cuya vida quedó escondida con Cristo, aquellos que en esta tierra pelearon la buena batalla de la fe, resplandecerán con la gloria del Redentor en el reino de Dios.

No transcurrirá mucho tiempo antes que veamos a Aquel en quien ciframos nuestras esperanzas de vida eterna. Y en su presencia todas las pruebas y los sufrimientos de esta vida serán como nada. “No perdáis pues vuestra confianza que tiene grande remuneración de galardón: porque la paciencia os es necesaria; para que, habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa. Porque aún un poquito, y el que ha de venir vendrá, y no tardará” Hebreos 10:35-37. Alzad los ojos, sí, alzad los ojos, y permitid que vuestra fe aumente de continuo. Dejad que esta fe os guíe a lo largo de la senda estrecha que, pasando por las puertas de la ciudad de Dios, nos lleva al gran más allá, al amplio e ilimitado futuro de gloria destinado a los redimidos. “Pues, hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor. Mirad cómo el labrador espera el precioso fruto de la tierra, aguardando con paciencia, hasta que reciba la lluvia temprana y tardía. Tened también vosotros paciencia; confirmad vuestros corazones: porque la venida del Señor se acerca” Santiago 5:7, 8.